Por: Jukari Conde*
Aunque se ha ganado mucho camino desde la Primera Marcha del Orgullo, nos seguimos enfrentando a desafíos culturales similares a los de nuestros predecesores. Si bien ahora tenemos nuevos derechos civiles, seguimos bajo el yugo de la hetero-normalidad donde aún es necesario “salir de closet”.
Aspiro que en un futuro no muy lejano nuestra orientación sexual no sea relevante, a tal punto donde ya no se vean a padres llorando y pensando que hicieron algo mal debido a que su hijo es homosexual.
Nuestros pares heterosexuales no tienen que salir del closet y mucho menos tienen que lidiar una pelea interna y moral contra lo que les enseñaron.
Es por ello, a que espero con gran emoción el día en que podamos ser tratados igualmente, siento que allí habremos conquistado una de las luchas más grandes, la cultural, cuando eso pase será una bendición para las siguientes generaciones.
*Jukari Conde es joven artista amateur. Le encuentras en Instagram como: @iraku_conde
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