Palabras: Esther Azul Eléctrico*
Ilustración: ja_kgender**
¿Que fue primero? ¿el huevo o la gallina? gran pregunta sin respuesta. Así me siento yo estos días. En realidad, no sé si son solo estos días, lo que si se, es que estos días son mas intensos. En estos días de pandemia, de incertidumbre en los que obligada a salir de mi realidad a la fuerza lidio con todo para ajustarme a una realidad cyborg, que nadie comprende.
En estos días de pandemia, la batalla contra mí misma y mi cuerpo crece y se desata una guerra que nunca antes he vivido. En esta pelea, me insulto, me humillo y me hablo mal, como muchas otras veces. Con la diferencia de que esta vez, no tengo a donde escapar, ni a donde ir, ni la excusa de ponerme a hacer otra cosa me salva. En estos momentos, me toca estar, sin hacer, estando en mi cuerpo y batallando lo que eso significa.
Y me cuestiono y castigo, pensando en qué clase de feminista soy yo, que no puedo ir contra las normas que el patriarcado ha impuesto sobre mí. ¿Acaso no soy yo super consciente? ¿no me considero en deconstrucción? ¿empoderada? Pero el empoderamiento se me acaba en el momento en el que no solo lidio contra mi cuerpo y este trastorno en la conducta alimentaria que me persigue, feroz e inminente. En esos momentos, me siento pequeña y grande a la vez, no entro en mi propio cuerpo y menos en mi cabeza.
La palabra feminismo y patriarcado retumban constantemente, como cuando gritas en una cueva y el eco hace su trabajo de amplificación. Y es entonces cuando entiendo, que esto no tiene nada que ver con la maldita pandemia ni los tiempos que corren. Que esto venía así desde hace muchísimos años y la información se va heredando de generación en generación. Y por fin entiendo que el trabajo de deconstrucción es un proceso constante y que sufrir un TCA no va de la mano de no ser feminista, ni de modas pasajeras ni berrinches de niña caprichosa que llora por tener otro vestido diferente al que le ha tocado.
*Esther Azul Eléctrico. Artista, feminista y creadora. @estherazulelectrico